Adrián Mancheño es jefe de cocina en el Restaurante Hispania de Bruselas.

Cuéntanos lo que quieras sobre ti y tu trabajo. ¿Cuál es tu relación con España/Bélgica?

Me llamo Adrián Mancheño y soy el jefe de cocina del restaurante Hispania en Bruselas. Mi trabajo consiste en ofrecer una propuesta de cocina española en la que la calidad y el respeto al producto sean los buques insignia. Con estos principios en mente me encargo de la oferta gastronómica del restaurante Hispania, y también de la del Hotel NH Collection du Grand Sablon.

He de reconocer que me encanta mi trabajo, soy un auténtico apasionado de la gastronomía. En este sentido, no me centro única y exclusivamente en la cocina, sino que hay otros aspectos que despiertan gran interés en mí, como puede ser el mundo del vino e incluso de la cerveza (desde que vivo en Bruselas he aprendido a apreciarla).

Siempre me ha gustado viajar y conocer sitios nuevos, por ello decidí embarcarme en esta aventura y mudarme a Bruselas. Llevo tres años viviendo en esta ciudad y estoy absolutamente enamorado de ella, de su multiculturalidad, de las posibilidades que te ofrece (tanto profesionalmente como personales) y del sentimiento de hogar que proporciona al que lleva aquí tan solo unos meses.

No obstante, y pese a estar muy a gusto en este país, mis vínculos con España son muy fuertes. No sólo dedico mi vida profesional a la cultura gastronómica española, sino que también tengo una vida personal muy española. Mi pareja es española, de Oviedo precisamente, y gran parte de nuestros amigos y conocidos también lo son. Ese grupo de amigos que nos hemos creado en esta ciudad se han convertido en mi familia, y por eso intentamos coincidir y organizar comidas/cenas siempre que podemos. En estos encuentros la cocina española no falta, y siempre acabamos teniendo una amplia representación de las diferentes tradiciones culinarias de nuestro país.

Como ya he dicho, mi vida gira en torno a la cocina, por lo que no sorprende que uno de mis hobbies sea cocinar. No obstante, soy una persona normal y también me gustan otro tipo de cosas como el deporte, los tatuajes (mis dos brazos dan buena fe de ello), los viajes, la música… Me imagino que un poco lo que le gusta a todo el mundo.

¿Un lugar especial en Bélgica? ¿Un lugar especial en España?

Un lugar especial para mí en Bélgica es la ciudad de Gante. Me encantan sus canales, su ambiente joven y dinámico, y el “buen rollo” que me transmite. Sin embargo, hay un lugar en el centro de Bruselas que me encanta, y ese es el Parc Egmont. Se encuentra muy cerca del restaurante y de mi casa, y me encanta pasar ratos en ese lugar desconectado un poco del ajetreo de la ciudad.

Un lugar especial para mí en España es Asturias. Me encanta su naturaleza, su gente y en especial su comida. Para todo aquel que no haya visitado nunca Asturias, creo que es muy recomendable y estoy seguro que os encantará tanto nuestra increíble costa, como nuestro interior, en el que podéis encontrar tesoros como los Lagos de Covadonga.

¿Una canción?

Fall to Pieces de Velvet Revolver.

¿Una película?

Hace poco vi la película Los Dos Papas y me encantó. La encuentro muy redonda, y muy interesante.

¿Un libro?

Cualquiera bueno de cocina. Como ya os comentaba, mi pasión es la cocina, así que gran parte de lo que leo es sobre este tema. Montagud editores hace verdaderas obras de arte, y uno de los libros que más me ha gustado es Caldos/Broths de Ricard Camarena.

¿Un espectáculo?

Realmente para mí un espectáculo es ir a un restaurante en el que te sorprendan y te hagan disfrutar desde que entras por la puerta. Afortunadamente, en España podemos disfrutar de sitios donde estos espectáculos son del más alto nivel, pero así a bote pronto se me han venido a la cabeza el restaurante Sant Celoni en Madrid, o el restaurante Disfrutar en Barcelona.

¿Una obra plástica?

La obra de Dalí me parece impresionante. No hace mucho pude visitar la exposición Dalí & Magritte y me parece absolutamente fascinante. Me podría pasar horas mirando a sus obras, aunque he de reconocer que no sé mucho de pintura.

Cuando me despierto, mi primer pensamiento es…

Mi primer pensamiento es: ¿qué desayuno hoy?. Me gusta variar un poco y no suelo desayunar lo mismo todos los días. Mi segundo pensamiento es: ¿qué desayunará Pilar?. Y esa respuesta es fácil porque ella sí que desayuna siempre lo mismo.