Nicolas Grolleau
Nicolas es el responsable del festival del Fanzine belga, que este año, al no poder tener lugar, recogerá a todos los artistas en una revista titulada “Le Petit Pangolin Illustré”.
¿Cuál es su relación con España y Bélgica?
Mi relación existe desde que fui al festival CRACK! en Roma, el mayor festival internacional de micro-publicaciones del mundo y el más antiguo (este año se celebra la 18ª edición). Allí conocí a artistas españoles de los que me hice amigo y a los que me alegro de volver a ver cada año. Aunque me han invitado a sus respectivos festivales (festival Tenderete, Tropicana Dreams) todavía no he podido acudir. El año pasado conseguí que 3 de los organizadores de estos 2 festivales vinieran a Bruselas para nuestro festival de fanzine.
¿Un lugar especial en Bélgica? ¿Un lugar especial en España?
Mi lugar especial en Bélgica es, por supuesto, el Bunker Ciné-Théâtre que alberga la Petite Fanzinothèque Belge. Se trata de un lugar independiente, no institucional, en el que se pueden encontrar más de 10.000 fanzines en su mayoría belgas. ¡Es el único lugar en Bélgica en donde se archivan estas publicaciones en pequeñas tiradas! Artísticas o no, pagadas o no, siempre llenas de fuerza, lo que concuerda bien con el espíritu del Bunker Ciné-Théâtre.
Un lugar al que tengo muchas ganas de ir es el Centre Del Carme (Valencia), en donde tiene lugar el festival Tenderete, uno de los centros neurálgicos del fanzine, puesto que tiene dos ediciones al año, una en primavera y otra en otoño.
¿Una canción?
Maria Violenza - La balada de la indiferencia.
Es la reencarnación en la textura del sonido y la forma de cantar (¡su emoción!) del mundo subterráneo en el que los fanzines viven y sobreviven. Este mismo mundo en el que navego.
¿Una película?
Uno canta, el otro no - de Agnès Varda, 1977.
Una brillante feminista y activista en una intensa doble historia (tanto a nivel narrativo como visual) dirigida por Agnès Varda que ya tenía 50 años en el momento de la película, ¡aunque parece tener solo 25!
¿Un libro?
Los fanzines de Abraham Díaz, un artista gráfico underground mexicano (sobre todo de cómics) cuyo único fanzine ha sido traducido y se llama "Mediocridad innata", donde descubrimos, detrás de su estilo de dibujo punk, sutilezas de línea y narración que con cada lectura me atraen más y más. Somos de la misma edad, e incluso simpatizamos (hace 2 años) durante un festival en Serbia (Novo Doba) al que fue invitado. Desde entonces intento traerlo a Bélgica.
¿Un espectáculo?
El 16 de noviembre de 2019, el Concierto de Jean-Louis Costes, músico/intérprete conocido por su "basura y ruido pop", que vino al cine Bunker por primera vez a pesar de sus casi 70 años. ¡Su espectáculo, mitad canción, mitad puesta en escena, hizo que el público disfrutara al máximo! Además fue con motivo de la exposición de otra artista underground, Anne Van Der Linden, que tampoco dejó de lado su espíritu corrosivo.
¿Una obra plástica?
Los libros-objeto de los dos editores de BANDE DE ediciones, que se abren y despliegan de mil y una formas y que me hacen cuestionarme la idea de la edición, ya que estos libros son algo caros debido al tiempo que requieren y a la dificultad de su encuadernado; ya que este tipo de libro solo puede hacerse a mano. Sin embargo, por otro lado, esto lo convierte en un objeto difícil de manejar y por lo tanto restringe su transporte. Es otro tipo de experiencia que hace que uno se plantee lo que es un libro.
Cuando me despierto, mi primer pensamiento es...
¡Vaya! Todos estos fanzines que cogí de la Fanzinothèque y que aún no he codificado en la base de datos. ¡Tardaré años!... ¿Debemos encontrar fondos para nuestro trabajo o permanecer totalmente independientes?